Técnicas de estudio: ojo con tu lugar de estudio

Cuando hablamos de técnicas de estudio mucha gente olvida la importancia que tiene escoger y acondicionar bien el lugar en el que vamos a estudiar las oposiciones. Para concentrarnos mentalmente necesitamos centrar la atención sobre lo que estemos realizando o pensando en ese momento, dejando de lado todo lo que nos rodee. Lo conseguiremos más rápidamente si establecemos un buen lugar de estudio, señala la Academia TEBA de oposiciones Guardia Civil Jáen.

En la mayoría de blogs, páginas y portales de oposiciones dan consejos sobre cómo debe ser tu lugar de estudio. En mi caso, adaptarme el sitio para poder concentrarme fue necesario para no distraerme más de la cuenta. Como técnica de estudio lo considero tan importante como ejercitar la memoria. He reunido algunos consejos básicos que me sirvieron de ayuda, junto a unas recomendaciones que pueden servirte para evitar algún que otro dolor postural. ¡Concentrémonos pues!

Te recomiendo que elijas un sitio fijo para estudiar. A partir de ahora será tu templo. Cuando estudias unas oposiciones es importante que te crees una disciplina diaria y una buena forma de comenzar es utilizando siempre el mismo espacio.

Aunque hay personas que dicen que les gusta estudiar con música yo siempre he preferido estar en un lugar lo más silencioso posible, que me aporte calma y serenidad. ¡Que nada ni nadie te moleste!

El lugar de estudio tiene que estar bien ventilado y limpio. Esto hará que sea más agradable estudiar y que puedas estar más a gusto. Intenta recoger todo el temario cada vez que termines. Al día siguiente puede ser mortal tener que reordenar los apuntes del día anterior antes de ponerse a estudiar de nuevo.

Estudia a ser posible con luz natural. Si no puede ser así o tienes que estudiar de noche, se recomienda colocar la luz en el lado contrario al que escribes y que el flexo tenga una bombilla azul de 60 watios. He de reconocer que la mía siempre fue blanca 🙂

Tiene que haber una buena temperatura en el estudio. La mayoría de los expertos aconsejan unos 22 grados centígrados. Yo no compraría un termómetro para comprobarlo, simplemente basta con servirse de la calefacción, la estufa, el aire acondicionado, el ventilador o lo que se tenga a mano con el fin de estar bien y no pasar ni frío ni calor. Será difícil que te puedas concentrar si estás en una sauna o en un congelador.

Hay que tener la mesa despejada para que no haya distracciones de ningún tipo. Las medidas recomendadas son una altura de 65 a 75 cm y unos 70 a 100 cm de profundidad. Lo ideal es que puedas alcanzar cualquier cosa sin tener que hacer torsiones ni estirar demasiado los brazos 😉

La silla recomendada para estudiar debe tener una altura ajustable que puede estar entre los 38 y 48 cm respecto al nivel del suelo y tener una anchura de 40 cm. A ser posible con ruedas para facilitar el desplazamiento. Deberás tener la espalda apoyada en el respaldo de la silla, el tronco estirado y los apuntes a unos 30 cm de distancia.

Además es conveniente que tengas un reposapiés. De no ser así, intenta tener siempre los pies apoyados totalmente en el suelo.

 

Por último ten cerca una estantería donde colocar todo el material que necesites. Ten a mano leyes, resúmenes, esquemas y cuestionarios. No debes levantarte de la silla cada vez que necesites consultar alguna cosa o subrayar algo.

Estos consejos contribuirán a que tengas más acondicionado tu lugar de estudio. Recuerda que su finalidad es ayudarte a concentrarte pero si en algún momento no lo consigues… no desesperes. Seguro que al final acabas por lograr tu objetivo. ¡Hasta pronto!