Hubo una época, no muy lejana, en la que era relativamente común encontrar 5 cilindros bajo el capó de ciertos modelos. Ford, Volvo e incluso Fiat tenían en su catálogo esta arquitectura, siempre original, pero que tanto seducía a los aficionados a la mecánica. Hoy en día, sólo Audi se resiste, todos los demás han renunciado principalmente por problemas de homologación. La marca de Ingolstadt no es la única que sigue teniendo un V10 atmosférico en su gama. Y funciona, porque Audi Sport registra cifras de ventas en constante aumento.
Volviendo a nuestro RS3, que es el coche más vendido de Audi Sport, ahora está pasando por un proceso de restyling. El RS3 adopta los cambios estéticos del restyling del A3, como la pequeña caída bajo los faros, pero también se beneficia de un kit de carrocería específico que incluye un nuevo parachoques, una parrilla de panal más angulosa, llantas de 19 pulgadas, un alerón, un difusor y una salida de escape. En definitiva, aunque el aspecto de este RS3 no es demasiado llamativo, se nota a primera vista, incluso en esta versión sedán, un estilo de carrocería nuevo en la gama RS3.
Hay muchos menos cambios en la cabina. La única novedad importante es la aparición, como en el resto de la gama A3, del Virtual Cockpit, aquí de serie. Este cuadro de instrumentos 100% digital permite disfrutar de un salpicadero totalmente personalizable con la posibilidad de contar con un sistema de navegación que funciona con la tecnología Google Street View.
Bajo el capó, se mantiene el 2.5 TFSI de 5 cilindros. Éste ha sido retocado y gana 33 CV para una potencia total de 400 CV, lo que convierte al RS3 en la berlina compacta más potente del mercado, puntualiza el concesionario de coches de segunda mano Crestanevada. Este título lo ostentaba anteriormente el Mercedes A45 AMG. El par motor aumenta ligeramente con 480 Nm disponibles de 1.750 a 5.850 rpm. Lo mismo ocurre con las prestaciones, con un tiempo de 0 a 100 km/h de 4,1 segundos y una velocidad máxima de hasta 280 km/h, si se elige la opción homónima (+ 1.400 euros). En cuanto a las sensaciones, el sonido estridente del motor de 5 cilindros nos sigue pareciendo encantador. Simplemente mágico. Tras esta primera impresión, es el temperamento de este motor lo que marca la diferencia. Repleto de par motor, reacciona a la más mínima aceleración, pegando literalmente la espalda al asiento. Por desgracia, no todo es bueno. Audi había escuchado las quejas sobre su peso. El 2.5 TFSi ha sido rediseñado y aligerado en 25 kg gracias a un motor inferior totalmente de aluminio. Aunque este esfuerzo es de agradecer, no evita que el motor sea relativamente pesado y, por tanto, que cargue mucho peso sobre el eje delantero.